La Iglesia Parroquial de Sant Esteve, Bien Cultural de Interés Nacional situado en la plaza del Rector Ferrer d'Olot, tiene una rica historia que se remonta al año 846. A través de los siglos, la iglesia ha sufrido varios cambios y ha sido reconstruida cinco veces en el mismo lugar, y cada vez la han hecho más grande que la anterior.
La iglesia es tanto o más importante por su historia como por los tesoros que acoge en su interior y que también han recibido la declaración de Bien Cultural de Interés Nacional, destacando singularmente el retablo del Roser, de madera tallada y policromada, fechado entre 1704 y 1707 y obra de Pau Costa.
Hoy en día, Sant Esteve d'Olot es considerado uno de los templos más importantes de las comarcas gerundenses, gracias a su diversidad de estilos y dimensiones, que incluyen elementos románicos, góticos, renacentistas y neoclásicos.
Dentro del centro parroquial de San Esteban, se puede encontrar un importante tesoro patrimonial, situado en la antigua capilla de la Inmaculada. Esta capilla del estilo rococó contiene una cúpula extraordinaria pintada por el famoso artista Manuel Tramulles del siglo XVIII.
En este tesoro se conservan un gran número de objetos y obras de arte, incluyendo una colección de orfebrería de las más importantes de la diócesis de Girona, pinturas góticas, imágenes barrocas, una lápida sinagogal del siglo XIII y una famosa pintura de El Greco titulada Cristo abrazando la cruz.
También se puede admirar una amplia variedad de esculturas, relieves y otras piezas de arte, como el Santo Cristo de Ramón Amadeu i Grau, la talla policromada representando a Ángeles con la Verónica y el combregador de hierro forjado y dorado, todas del siglo XIX.
Sant Esteve d'Olot es, pues por todos estos motivos, un lugar excepcional de visita obligada para amantes del arte y de la historia de nuestro país.
Visita Can Trincheria, una de las casas solariegas más importantes de Olot, situada en el número 29 de la calle de Sant Esteve. La casa-museo es un ejemplo de lo que fue la vida de una familia acomodada durante la primera mitad del siglo XVIII.
El claustro del antiguo convento del Carme en Olot, situado en la calle Pare Antoni Soler, 3, es una galería renacentista impresionante, una de las más simétricas y originales de toda Cataluña.
El Eixample Malagrida es la joya urbanística más emblemática de Olot. Construido entre los años 1916 y 1925 es un ejemplo de las ciudades-jardín novecentistas que se popularizaron a principios del siglo XX.